Santa Catalina es un monasterio. Aún viven allí varias religiosas, pero no se trata de un lugar moderno. Es una pequeña ciudad atrapada en el tiempo. Revisa su web antes de ir. Hay fechas en las que los peruanos pagamos menos por la entrada. 

Aquí se camina, y bastante. Te recomiendo ir en la tarde, luego de visitar la campiña y tras almorzar rico (en Arequipa cocinan bastante bien). Usa zapatillas y carga tu botella de agua.

El recorrido arranca por el locutorio. Allí verás como se comunicaban las monjas con el mundo. Un torno, una ventana y nada más. Se acabó (pobres). Luego entras al patio de Silencio (buen lugar para tomar una foto), y verás dos caminos el patio de las novicias y el de los naranjos.

El patio de las novicias no esta pintado. Verás un patio en donde las celdas (cuartos) que eran de niñas de 12 años. Ellas todo el día estaban rezando y les pasaban sus alimentos por la ventana. En ese mismo patio tenían una iglesia para ellas.

Luego de eso puedes ver el patio de los naranjos. Esta pintado de azul fuerte y en el medio tres cruces. Las mujeres que estaban aquí ya eran religiosas, no novicias. Las casas son más grandes, con camas, instrumentos de música y cocinas. A veces se compartían casas.

Caminando por los pasadizos, encontrarás las calles más antiguas, por ejemplo Toledo o Sevilla. Aquí los colores son ocre. NO TE APOYES EN LAS PAREDES o tu ropa quedará pintada. Si hay un buen clima, podrás ver los volcanes desde estas calles.

Seguimos caminando, y ahora vamos por la pileta. Aquí, cerca a la cocina, hay un mirador y podrás ver lo grande que esta ciudad detenida en el tiempo.

#GABODATO: Santa Catalina debe ser visto con tiempo. Si puedes ir en la tarde es mejor, no hay tanto calor. Algunas noches esta abierta y la puedes ver completamente iluminada.

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